Los coches eléctricos no terminan de imponerse porque
las baterías cuestan demasiado. ¿Cuándo serán competitivas?
Su ritmo de adopción será lento porque son muy caros. Y lo son porque uno de sus
componentes dispara su precio final. Para que los vehículos eléctricos y los
híbridos puedan competir con los coches con motor de combustión
interna, el precio de las baterías
tiene que bajar entre un 50 y un 80 %, según cálculos recientes del
Departamento de Energía de Estados Unidos.
¿Cuándo ocurrirá eso? Debido a las pocas ventas de coches eléctricos, las
empresas de baterías operan muy por debajo de su capacidad prevista y tienen
problemas para sobrevivir. Necesitan mejorar su tecnología, sino quieren quebrar, como ha ocurrido
con A123 Systems.
Los vehículos eléctricos son más baratos que los
coches convencionales, pero esa ventaja económica desaparece debido al coste de
las baterías. El paquete de baterías para el Chevrolet Volt cuesta unos 6.300 euros. La batería del Nissan Leag, más grande, cuesta unos unos 9.400 euros.
Pues bien. Según un estudio, el coste de la batería
para el Leaf podría bajar hasta unos 3.100 euros en 2025. Para lograrlo bastará
con aumentar la escala de
producción de las baterías, forzar una bajada
de costes de los componentes y duplicar la densidad de energía de las baterías, lo que reduce los costes de
materiales.
Una start-up, Envia Systems, ya ha construido prototipos de pilas de ion-litio
que almacenan aproximadamente el doble de energía que las mejores baterías
convencionales de este tipo y se pueden recargar cientos de veces. Eso sí,
podrían pasar unos años hasta que las veamos componentes de los coches, según
afirma la empresa.
También puede ser que la respuesta no esté en las
baterías de ion-litio. Aquí tres ejemplos:
- Toyota
investiga cambios en el diseño de las baterías. Piensan en sustituir el
electrolito líquido de una batería de ion-litio convencional por un material sólido, lo que
posibilita toda una serie de cambios en el diseño de la batería que
permitirían hacer el sistema más pequeño y reducir su coste. Gracias a
estas baterías en estado sólido y a otras tecnologías se podría reducir el
tamaño del paquete de baterías hasta en un 80 %.
- Sakti3, una start-upligada a GM, también está desarrollando
baterías en estado sólido y hace poco empezó a mandar prototipos a sus
clientes potenciales para que las prueben.
- 24M, una start-up recién creada con sede
en Cambridge, Massachusetts (EE.UU.) está utilizando un enfoque distinto.
En vez de una batería sólida, la empresa desarrolla un cruce entre una
batería y una pila de combustible en el que los electrodos de la batería
son un líquido viscoso que se puede bombear. Tendrían densidades
energéticas varias veces superiores a las de las baterías de los coches
eléctricos actuales.
Cada una de estas tecnologías (y aún hay más),
conlleva sus propios problemas. Además, aunque se resuelvan los problemas de
las nuevas tecnologías en los laboratorios, se puede tardar décadas en desarrollar los sistemas de fabricación
necesarios para producir las baterías a gran escala de forma fiable y en
cantidades suficientes para dar energía a los coches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario