¿No te ha pasado que, en ocasiones, ves un coche y te
recuerda a un modelo de otra marca? En algunos casos son plagios de diseño, cambiando pequeños
detalles para que no sea una copia idéntica, y en otros, esta semejanza de
diseño viene impulsada por acuerdos de dos marcas a nivel empresarial. Sin
meternos en cuál de estos dos supuestos son los que encontramos a continuación,
os animamos a pasar un rato divertido buscando las diferencias entre estos
modelos:
El Ford Ka y el Fiat 500 no es que tengan un diseño parecido pero sí que tienen la misma idea o concepto de coche. Tres puertas, pequeño tamaño y con techo curvo.
Ahora es turno del Suzuki SX4 y el Fiat
Seidici. El morro, la forma de los faros, de las puertas, la longitud… todo
guarda un parecido casi exacto.
Nos encontramos ahora al Ford Maverick y al Nissan Terrano. No son copias de agua pero es indudable el
parecido en cuanto a forma e idea de distribución de elementos. Los faros
guardan un gran parecido, al igual que el lateral.
Estas dos pick-up seguro que son hermanas gemelas y aún no se conocen.
Llega ahora el plato fuerte. El caso del Opel Agila y del Suzuki Splash no tiene discusión. Lo máximo que
hemos podido notar es la diferencia entre la parte más baja del faro delantero,
nada más. (Una fina línea en el capó del Opel, quizá).
Caso bestial el que viene ahora. Si fuera una película lo llamaríamos
“Cuatro modelos y un parecido”. Salvo la delantera, típica de cada marca,
encontramos un mismo aspecto compartido por el Fiat Ulysse, el Citroën C8, el
Lancia Phedra y el Peugeot 807. Fíjate, sobre todo, en el detalle del tirador
de la puerta.
Y por último, el frontal del Lada Concept y del Volkswagen Scirocco. Sobran las palabras.
¿Os ha parecido interesante este artículo?
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