Consejos para pasar la ITV

La Inspección Técnica de Vehículos es un procedimiento obligatorio para todos los vehículos. Un trámite básico para comprobar y confirmar el estado en el que se encuentran, que asegura tanto a los conductores de los mismos como a los del resto.

Certifica el cumplimiento de la legalidad y protege a todo el entorno.

Cuanta más antigüedad tiene nuestro automóvil, más posible es que se sucedan averías y defectos. Por ello, las revisiones son más habituales tras los primeros años de la primera matriculación.

Pasar a la primera la ITV puede ser fácil si se cuida e invierte tiempo y dinero en nuestro coche. Esto supone constancia y esfuerzo, algo que merece la pena tanto a largo como a corto plazo. Además, seguir una serie de recomendaciones antes de este examen resulta indispensable y apropiado.

- Ir al taller. Antes de la cita para la inspección es muy recomendable acudir a nuestro taller para una revisión previa del vehículo que subsanará cualquier fallo y lo pondrá a punto.

- Llevar la documentación. Es necesaria la Tarjeta de Inspección Técnica, el Permiso de Circulación y el último recibo del seguro del coche.

- Circula. Se aconseja recorrer como mínimo 20 kilómetros en cuarta para que el motor tenga una temperatura normal y limpiar la “carbonilla” para obtener unos niveles aptos de emisión de gases.

- Comprueba el alumbrado. Es una de las causas más frecuentes por las que no se supera la ITV, por lo que una comprobación anterior de las luces puede ser muy beneficiosa.

- Mira el nivel de los líquidos. Tanto el aceite como el agua del limpiaparabrisas deben encontrarse en los niveles indicados.

- Repasa el estado de las ruedas. La presión, la profundidad del dibujo y el desgaste uniforme deben comprobarse.

- Revisa las matrículas. Es esencial que estén sujetas, sean perfectamente visibles y que no presenten daños como dobladuras o bordes cortantes.

- Lava tu coche. Un coche limpio por dentro y por fuera causará una mejor impresión al inspector.